En 1966, a lo largo de varias semanas, la revista El Ruedo, se dedicó a solicitar a los fotógrafo que les enviaran instantáneas de la "suerte suprema". No pidió que seleccionaran buenas ni malas. Por ello hay de todo. Según la revista, sin afán de criticar a unos y elogiar a otros.
Ignoro si realmente ocurrió con imparcialidad. Me da igual. Lo cierto es que, sin estar de acuerdo en todos los comentarios, en ese puñado de fotos se puede aprender sobre la suerte de matar.
Hoy los "julipié" o los puñetazos que dan algunos se aplauden. No importa que la mano izquierda no toree. Ni que la muleta sirva para tapar la cara al toro. Lo importante es que la espada quede dentro y que el Toro caiga pronto...