domingo, 23 de enero de 2011

Madrid 1952, Rafael Ortega



La verónica la puse en otra entrada referida a la alternativa de Rafael en 1949. Aquí está en su momento verdadero, es del día de la crónica de Madrid. San Isidro de 1952. Había triunfado la semana anterior y el público de entonces lo admiraba. La crónica, a mi me parece de interés. Hay varios detalles con los que he disfrutado. El juego de los Montalvo, el toreo de Rafael, el pundonor de todos... David a una mano...

8 comentarios:

Gil de O. dijo...

Olé! Olé! y Olé! a Rafael Ortega.
La virgen santa que dos verónicas!

Tan dificil es entender, cuando se torea bien? Tan locos estamos? Por favor...

Gil de O.

fabad dijo...

Nos quieren dirigir a "otro Toreo" y se cantan como buenas las tramposas maneras de :
-muleta retrasada
-echar el Toro hacia afuera
-pierna contraria escondida
-la ventaja de no cargar la suerte
-el mayor riesgo al no cruzarse
-tapar la cara al Toro, al matar
Todo eso da lugar a que la pureza en el Toreo sea una reliquia para aficionados "de antes".
¡Con lo fácil que es distinguir una buena verónica hasta en malas fotos!

Antonio Díaz dijo...

Si la miras a la ligera te puede llevar a engaño. Porque se puede decir que esa foto se la puedes sacar hoy a muchos toreros. Que si los toros ahora son más grandes, o que los hay que tambien se cruzan y hunden el mentón en el pecho. Que tienen la virtud del temple y cierta torería. Podemos estar de acuerdo.

Pero ahora, hay que centrarse lo primero, en el tamaño y textura de la capa, creo que hoy no se le dá, desde el tendido y la crítica, la importancia que tiene la "herramienta de torear". Y segundo, la posición de las manos. Ahí hay mando, dominio, se lleva el toro "toreado". No es el pasa-toro, estético a veces eso sí, que se puede ver con muchos toreros que hoy nos ponen como artistas.


Saludos, a Paco y a Gil, que me lo encuentro en todos lados.

Xavier González Fisher dijo...

La "summa" del toreo puro, dígase lo que se diga. Y sin embargo, la "historia oficial" solo le recuerda como un gran estoqueador. ¿Hasta cuándo le harán justicia?

fabad dijo...

Ya sabes que en mi opinión la Historia no está escrita. Solo la que considera a las grandes figuras pero no a los grandes toreros.
De todas formas, creo que son muchos los aficionados que lo tienen como lo que fue: EL TOREO PURO y además un gran estoqueador.

Enrique Martín dijo...

Fabad:
El traernos a Rafael Ortega revela muy buen gusto taurino. Coincido con Xavier en la injusticia de quedarnos solo en el buen, magnífico, estoqueador, para muestra la foto que parece preparada para que todo sea perfecto en el momento supremo. Y además esas dos verónicas impresionantes. Yo solo lo he podido ver en vídeos y me parece un toreo de una pureza y una verdad extraordinaria.
Y no quiero pasar por alto la foto del toreo a una mano, que ya practicamente solo se ve como excepciones y no como un uso habitual.
Un saludo

fabad dijo...

Enrique, soy un vicioso recalcitrante. Me gusta, Rafael, pero ¿y Curro, Paula, Ordóñez, Miguelín, Emilio Muñoz...?. Creo que mi problema es que hay muy pocos que no me gusten. Unos me emocionan mas que otros (incluso en fotos, que en efecto a veces engañan para bien y para mal. Yo le dedico muchas horas a ver fotos toreando). Creo que quitando a El Soro, El Capea, Savalli...(hay y hubo mas pero no es cuestión de forzar la memoria para algo negativo) a todos les encuentro algo. A David Mora no lo aguanto pero no es por su toreo...
En la Plaza ya busco mas los detalles que van desapreciendo: colocación, toreo a una mano, ejecución de un par en la cara, cite ortodoxo, rematar atrás...En fin que me enrollo.

Xavier González Fisher dijo...

Vuelvo por aquí y es que me dio por releer la crónica, porque los toros de Montalvo de esos días eran de "lo otro", de Martínez, no de lo de ahora, es decir "más de lo mismo". ¿Sería por eso, que ya desde entonces el escriba les llamaba "duros"?

Luego, veo de nuevo que los toreros triunfadores no se "escaldaban" por volver al domingo siguiente. Hoy, con una salidita a saludar entre pitos y palmas, "se guardan" un mes.

Y por último (espero), ya andaba por allí Luque Gago, que hizo su historia propia entre los de plata y por supuesto, todavía se corrían los toros a una mano, don Alfredo David (decía "La Chicha"), dejó constancia de ello.

Saludos otra vez.