miércoles, 27 de octubre de 2010

Humor (negro)



Unos a los leones y por otra parte comodidad a diario. Al menos no le dejan las fundas. Mientras haya público... Y encima fuera de cacho y con la muleta retrasada...

2 comentarios:

Xavier González Fisher dijo...

Eso es lo que quisiera más de alguno, que el toro fuera como el del cartón, "de a mentiritas", para no pasar sofocos.

Algún criador (se me atraganta la palabra "ganadero") casi logra producir un bóvido similar a eso, pero le pasó lo que al que enseñaba a no comer a su caballo, cuando ya lo había conseguido, el penco se le murió.

Así pasa con el toro, a fuerza de hacerlo borreguno, llega el punto en el que se le "olvida" para que sale al ruedo y se acaba todo.

Un abrazo.

fabad dijo...

El otro aspecto es el del destoreo. Cuando veo chavales entrenando de Salón usando las trampas habituales... me suelo callar pues cada torero, incluso en ciernes, se siente el mejor del mundo y no van ellos a aceptar consejos de un simple aficionado. Por ello cuando damos alguna charla sobre el tema me explayo en pregonar la verdad y la pureza, incluso en el Toreo de Salón...
Saludos.