El Ruedo en su número 98 de 9 de Mayo de 1946, publica este artículo sobre Paquiro, que no sale bien parado ante un Toro, Diablo, del Duque de Osuna. Parece que el torero que estaba en todo su esplendor en 1836 (la corrida se celebró en Madrid el 24 de Mayo de ese año), le había jugado una mala pasada en un asunto de faldas al Sr. Duque.
El ganadero se la guardó y envió expresamente para él al citado Diablo.
No salió bien parado Paquiro, que al final juraba en arameo...
Si pinchan sobre la imagen podrán leer el relato de Manuel Soto Lluch.
Siempre nos habían contado que Paquiro podía con todo. Milongas de los aficionados de antes...
Viene esto a cuento tras leer la serie de milongas pasadas que he leido a Raúl, que tiene razón en lo que ofrece. En la época de la pata de Aparicio, ese despojo era un trofeo al uso (y dos patas...). El rabo de Girón, pues seguramente sería triunfalismo. Y lo mismo las faenas de Curro o Viti.
Desde luego en los años 60 (y no era cuestión de comida) el toro no era ejemplar en su presentación (y seguramente en edad). Acometer si que lo hacían y los caballos de los picadores, volaban por los aires. El torero se quedaba sin resuello y no había ocasión para decir eso de que el Toro se ha parado...
Naturalmente comparar épocas es muy difícil, pero no olvidemos que los que conceden los trofeos, son los públicos, que antes como ahora se enardecen por cualquier cosa.
Es verdad que con el tiempo el toro ha ido cambiando (a peor: falta casta y en consecuencia acometividad) pero lo que realmente ha cambiado ha sido el toreo.
Lo de no cargar la suerte, torear al hilo y echando el toro hacia fuera en aras a un muletazo mas largo y con "ventaja" para el toro...no me gusta. Creo que eso es cambiar las reglas del juego y el nuevo juego resultante....no me gusta, aunque Manzanares corte un rabo en la Maestranza indultando a un Toro de Cuvillo, ganadero que no necesita ver a sus toros en el caballo.
Quienes indultaron a ese toro ( y otro que indultó Luque en Granada) fueron las personas del público, contagiados por un callejón lleno de interesados que enfervorizadamente lo exigían.
Yo no digo que cualquier tiempo pasado fue mejor, se vive día a día y unas veces gusta mas que otras.
Yo (a título personal) ahora disfruto menos en los Toros, pero debe ser cosa de la edad...
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