En Marzo de 1951, se presentó en la Ciudad
Condal la promesa del toreo, Antonio Chenel
"Antoñete".
Nos quejamos hoy, pero observen la espada
de "la muleta de Castilla", Pablo Lozano, del
par de banderillas, tras citar en silla de Manolo
Sevilla y de la colocación en la tabla del cuello
de la banderilla en el de Antoñete.
Valga como "lección" de lo que no debe existir
en los ruedos.
1 comentario:
Aquí en Aguascalientes vimos a Antoñete y a Pablo Lozano. A Chenel, por única ocasión el 20 de diciembre de 1953, con Calesero y Armillita que volvía a los ruedos con toros de Xajay y cortó la única oreja de la tarde.
A Pablo Lozano (que casó con una dama mexicana, de San Luis Potosí), le tuvimos dos veces. El 1 de enero de 1963, con Luis Procuna y Jesús Delgadillo "El Estudiante" y toros de Peñuelas. Esa tarde las crónicas alabaron su torería.
Luego, el 21 de abril de ese año, volvió a actuar, de nuevo con Procuna y Rafael Rodríguez y toros de Ramiro González.
Pablo Lozano fue "el culpable" de que "El Estudiante", ya matador de toros, fuera a España a torear como novillero y lograra una nueva alternativa en Barcelona, la confirmación en Madrid y unas interesantes campañas españolas en los años sesenta.
Saludos.
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