martes, 6 de octubre de 2009

LA VERDAD Y LA MENTIRA


El Ruedo nº 1064, 17 de noviembre de 1964

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Entonces se llamaba la atención sobre la forma y el terreno en que se ejecutaban las suertes en el rejoneo, como hace Navalón en su artículo.No se llamaba la atención sobre otros aspectos como llevar una montura vaquera con el añadido de un borrén delantero, para aumentar la seguridad del jinete, o el manejo de las riendas a dos manos para todo menos para clavar porque no hacía falta. Hoy, tampoco se hace porque se admite como normal que el jinete use de estas ventajas, lo cual no es óbice para que se afirme que el rejoneo ha alcanzado "cotas insospechadas".
Oselito.

fabad dijo...

Navalón, es capaz de que lea cosas ¡hasta de rejoneo!