miércoles, 10 de marzo de 2010

El Tigre de Guanajuato


Fue un torero realmente con leyenda. Su dinastía sigue. Los frutos dispares. Su hijo Juan bien conocido en España. La mala suerte del Rey David, Alejandro, que a mi me pareció un torero de gran personalidad. A ver que pasa ahora con el Silveti que anda de novillero por estos lares.

1 comentario:

Xavier González Fisher dijo...

"Juan sin Miedo", "El Hombre de la Regadera", "Belmonte Mexicano", un sin fin de remoquetes a este valiente.

Tan valiente fue, que en tiempos de revoluciones, sacó una muleta (creo que ya lo conté por aquí) con una leyenda que decía "¡Viva Calles!" y como ganó el candidato contrario, se tuvo que ir a Sudamérica.

Volvió años después a despedirse al viejo Toreo, con Conchita Cintrón por delante y todavía le cortó orejas a los toros.

Era tradicional verlo con su traje de charro negro, decorado en lugar de con alamares de plata, con cráneos y huesos ("calaveras" les llamamos aquí) y un pavoroso revólver a la cintura, al que él llamaba "Doña Genoveva". Todo un personaje del que no se ha escrito todo lo que es y todo lo que ha dado.

Tres generaciones de matadores de toros han llevado el apellido Silveti, solo superados por los Caleseros, que llevan ya cuatro.

Saludos.