lunes, 7 de marzo de 2011

Sobre el afeitado.


El Ruedo, en el número 1441 de 1 de febrero de 1972, denuncia a través de una editorial el afeitado, ese fraude que siempre ha sobrevolado por la cabeza de la Fiesta y sobre los pitones de los Toros, ¡claro!. Siempre se ha negado y los toreros que lo han denunciado publicamente, lo han hecho por estar sin tabaco y además han salido trasquilados (y casi afeitados, en términos parecidos a la actitud mafiosa de Ignacio Zorita, que he leido y oido en "Toros en el Siglo XXI":
Es curiosa la defensa que hace el Editorial sobre la integridad de la Fiesta, pero no se alarmen, en Febrero, hay pocas cosas de las que hablar sobre Toros y era un buen momento para exigir seriedad. Afirman que ellos saben muy bien lo que pasa. Le echan la culpa a los toreros figura, bueno a sus mentores, pero empezó la Temporada y se les olvidó denunciar los casos concretos.
También denuncian el dar gato por liebre (utrero por toro) pero después se les olvidó también.

2 comentarios:

Gil de O. dijo...

Esta es una entrada como para que hubiese producido un gran número de comentarios, y de momento veo que no ha sido así.

Hago la lectura y llego a la conclusión de que sobre este tema del dichoso afeitado, al que desde los tiempos de José ya tenía un sobrenombre -adecentar- pues nunca los taurinos, robadores del término, se atrevieron a llamarle por su nombre, el que acuñó el pueblo, que es el de afeitado; pueblo que sin sentarse en la Real Academia, es quién crea el vocabulario.

Dicho lo cual, y volviendo a mi lectura, concluyo con que estamos todos hartos de machacar en frío. Con estos granujas nu hay quién pueda; van a dar lugar a que se vean las plazas vacias, y a que se prostituya la Fiesta, si es que no lo está ya.

Y las figuritas, aunque entre ellos haya algún Torero que no merece tal nombre por acomodarse en ese lado oscuro -verguenza torera "perdía"- que con su sorna profesionalizada dicen ser cosa del apoderado tales manipulaciones; que ya no son solamente de las astas, sino de cualquier cosa que toquen para mancharla en el manejo delictivo en lo que han convertido, su actividad profesioal. El responsable, quién paga y manda, el matador. No lo dudemos.

Gil de O.

fabad dijo...

Es un tema tan antiguo, que ya no despierta interés. El aficionado sabe que se sigue afeitando sin que pase nada. Al público le da igual, es una fiesta y no lo vamos a estropear con pitones íntegros.
estoy de acuerdo, son los matadores los responsables aunque busquen testaferros. Saludos Maestro.